El término experiencia de usuario o user experience (UX por su nombre en inglés) fue acuñado en la década de 1990 por Don Norman, vicepresidente del Grupo de Tecnología Avanzada de Apple, quien la definió como «todos los aspectos de la interacción del usuario final con la empresa, sus servicios y sus productos».
Actualmente, se conoce como el conjunto de factores y elementos relativos que componen la experiencia interna que vive el usuario al interactuar con un entorno, producto, dispositivo, página web o aplicación concretos, lo que resulta en una opinión positiva o negativa de los mismos.
Según Peter Morville, pionero en este campo, existen siete características indispensables para lograr una buena experiencia de usuario:
1. Útil
Se refiere a la utilidad, propósito, beneficio o sentido práctico del producto, ligados a la satisfacción de una necesidad; si no es útil para alguien su existencia no tiene sentido.
2. Usable
También conocida como usabilidad, es el nivel de sencillez y asequibilidad de uso del producto, el cual debe estar diseñado para lograr su propósito de forma efectiva y eficiente.
3. Encontrable
El producto y las partes que lo integran deben ser encontrables y ubicables con facilidad para usarlos de forma correcta. Esta característica es muy importante en productos digitales con mucho contenido.
4. Creíble
Es la confianza que los usuarios tienen en que los productos cumplirán efectivamente, a largo plazo y con mejores resultados que la competencia, la función para la que fueron creados.
5. Deseable
Se centra en sus atributos de imagen, identidad, marca, diseño emocional y otros elementos de Branding que hacen que los usuarios deseen más un producto que otro con los mismos atributos.
6. Accesible
Cualidad que permite proveer experiencias inclusivas que puedan ser percibidas y comprendidas por un amplio rango de usuarios, entre los que se cuentan personas con capacidades diferentes, como los sordos o los invidentes.
7. Valioso
Es el valor que el producto genera para la empresa que lo desarrolla y para el usuario que lo adquiere; para lograr este atributo es necesario alinear sus características con las necesidades del usuario.
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